Ruta Trstená - Tvrdošín

25.10.2008 10:15

 

A las 10.15h de la maňana salí de Trstená en dirección noroeste, hacia Uhlisko. El sendero (de gran recorrido) parte desde la gasolinera de Trstená y sube por el monte. Como ha llovido estos días el camino estaba impracticable y además hoy hacía niebla. El monte presentaba un aspecto fantasmal, la niebla no me abandonó en todo el camino.

 

Uhlisko es un monte de unos 860m de altura en donde hay una horrible antena de comunicaciones. Desde allí el camino baja hasta el pantano „Vodná Nádrž Orava“. Cuando terminaba el bosque me confundí de camino y me perdí un poco. Tuve que ir campo a través y vi una manada de corzos brincando. Estaban pastando y los asusté. Tardé un poco más de la cuenta en llegar al pantano y perdí un tiempo precioso.

 

Con la niebla que había, el pantano también tenía un aspecto fantasmal. Pasé justo por encima de la presa buscando un sendero que subía en dirección oeste. Me costó encontrarlo pero al fin di con él. Este sendero me llevaría de nuevo a enlazar con el sendero de gran recorrido.

 

A mi espalda iba quedando el pantano y a mi izquierda el pueblecito llamado Štefanov nad Oravou. El camino empezó a subir con una pendiente bastante grande hasta llegar a otra horrible torre de hormigón situada en un alto llamado Magurka. (1107m), desde allí el sendero (que en este punto es una antigua carretera asfaltada) bajaba hasta Pod Magurkou en donde tuve que tomar otro sendero, indicado con una seňal azul, que me conduciría a Tvrdošín pasando por Javorový Vrch (1076m).

 

Pasé por algunos lugares en donde le echan de comer a los ciervos y los corzos para cazarlos desde lejos de manera cobarde en innoble.

 

En este punto la seňalización es mala y no coincide con lo que viene en el mapa. Estuve a apunto de perderme de nuevo, pero pude ver Tvrdošín a lo lejos y me orienté.

 

Llegué a Tvrdošín a las 5h de la tarde y a las 5.20 h cogí un autobús que me llevó a Trestená.

 

Esta también ha sido una ruta dura ya que los caminos estaban intransitables y ha habido muchas subidas. La niebla me impidió ver el paisaje a lo lejos pero al mismo tiempo le daba una caracter especial, casi mágico, al bosque. Así me imagino yo a los bosques por donde debieron andar los druidas.Y vi corzos y un zorro (o eso me pareció). Ya estoy deseando que llegue el fin de semana que viene para hacer otra ruta.